El instituto Departamental de Salud de Norte de Santander presentó el informe de gestión realizada a corte del tercer trimestre de año. Liderada por el Director de la entidad, Carlos Martínez, y de manera virtual, los diputados escucharon una a una las acciones llevadas a cabo en el sector salud. Uno de los temas fundamentales en la gestión del IDS este año es la responsabilidad de enfrentar la pandemia por COVID-19.

Lo anterior permitió la constitución del Observatorio de Salud de Pública del departamento con énfasis en COVID-19 a través de la Sala de Análisis de Riesgo, SAR, que se establece como la principal herramienta para el seguimiento y análisis diario de los casos notificados como probables, sospechosos o confirmados para COVID-19 y desde donde se direccionan las estrategias e intervenciones de vigilancia con todos los municipios del departamento articulados con el Instituto Nacional de Salud, EAPB e IPS.

La inversión fue de $116.994.819 en mejoras locativas, suministro de mobiliario y equipos para funcionamiento, de la mano del observatorio de COVID-19, que es una realidad bajo la coordinación con la cooperación internacional, cuyos recursos fueron ejecutados por el orden de $99 millones.

De la misma manera, se determinó el fortalecimiento del sector salud mediante la adquisición de ambulancias medicalizadas para mejorar la capacidad de respuesta en el traslado de pacientes frente a la emergencia del coronavirus. La inversión total fue de $1.600.000.000, destinándose $320.000.000 por región, distribuidas así: Ábrego, ESE Regional Noroccidental; Gramalote, ESE Regional Centro; Cúcuta, ESE Hospital Universitario Erasmo Meoz; Chinácota, ESE Regional Suroriental y Tibú, ESE Regional Norte; beneficiándose toda la población nortesantandereana.

A esto se suman las acciones de fortalecimiento del Laboratorio de Salud Pública de Norte de Santander, que están relacionadas con la dotación e implementación de la técnica molecular PCR en tiempo real (rt-PCR) para mejorar la capacidad diagnóstica de COVID-19, beneficiándose así la población migrante, la población pobre no identificada y conglomerada. La inversión para este logro fue de $1.330.090.121 aportados el 31 de marzo del presente año por el Ministerio de Salud y Protección Social, $187.772.354 de recursos del Sistema General de Participaciones.

El IDS también ha volcado esfuerzos ante la expansión de camas UCI para atender la emergencia. Al inicio de la misma, el departamento contaba con 128 camas UCI en el la red privada, aumentando a corte del 23 de noviembre 220 para un total de 363, tanto en la REPS como autorizadas transitoriamente. En cuanto a camas UCI para la red pública se priorizaron 3 municipios: En Cúcuta el Hospital Universitario Erasmo Meoz con 111 camas; Ocaña, la ESE Emiro Quintero Cañizares con 18 camas UCI y la ESE Hospital San Juan de Dios de Pamplona con 19 camas UCI.

Un logro más para la salud en el departamento ha sido en el Centro de Atención Sanitaria Tienditas, donde se realizaron en los primeros 6 meses 22.730 tamizajes para COVID-19 y otros eventos de interés en salud pública, 4.503 consultas por médico general, 2.717 valoraciones por diferentes profesionales, 1.430 atenciones por anticoncepción, 2.883 dosis de vacunas administradas, 56 remisiones de urgencia y 22 casos positivos para COVID-19, como operaciones fundamentales para la atención de la población.

Es importante señalar, por otra parte, las acciones de impacto y Ley de Punto Final, donde el Instituto Departamental de Salud tiene una deuda de $159.276.000.000 que corresponde a servicios y tecnologías que no están incluidas en el Plan de Beneficios del régimen subsidiado por lo que el instituto es el responsable de realizar este pago. Ya se han cancelado $57.286.000.000 con recursos de sistema general de participaciones y rentas propias de departamento.

De esta manera, para lograr que el Ministerio de Hacienda y Crédito Público, y el Ministerio de Salud y Protección Social cofinancien lo faltante, el departamento debe hacer un esfuerzo para lograr un índice exigido por ley, a lo que la Gobernación de Norte de Santander ya dio respuesta con la aprobación de recursos por $7.600.000.000. Se espera que con esto el ente nacional cofinancie la deuda aproximada de $95.000.000.000 y oxigene las finanzas del ente de salud departamental.

Además de estos argumentos desplegados a la honorable Asamblea de Norte de Santander, también se presentaron detalles sobre los proyectos de ejecución en infraestructura hospitalaria, acciones de atención en salud y vigilancia, gestiones realizadas en cada una de las dimensiones, el estado financiero y proyecciones para el año 2021 en la entidad.

Gracias a esto, los representantes de los nortesantandereanos en la asamblea del departamento expusieron igualmente sus preocupaciones que fueron tomadas en cuenta, así como temas en los que se debe poner especial atención para el fortalecimiento en los servicios de la salud.