– Con la circulación de la nueva variante en el mundo, hay una razón adicional para iniciar la vacunación contra el covid-19, completar los esquemas o realizar el refuerzo.
La aparición de la nueva variante del covid-19, Ómicron, ha puesto en alerta a las autoridades sanitarias de todo el mundo, principalmente luego que la Organización Mundial de la Salud la declaró de interés y preocupación. Colombia por su parte ya hace vigilancia activa e invita a la ciudadanía a mantener la calma, pero con medidas.
A este respecto el director de Epidemiología y Demografía, Julián Fernández Niño, señaló que “es de tener en cuenta que todos los virus cambian desde el momento de su aparición, lo cual es constante y con un número de mutaciones cada cierto tiempo, pero se hace mayor cuando hay un importante número de personas infectadas”.
En el caso particular del Sars-CoV-2 lo que se observa gracias a los estudios de vigilancia genómica, es que hay variantes del inicial virus de Wuhan que tienen determinadas mutaciones, las cuales han tomado características diferentes, algunos de esos cambios genéticos se traducen en un comportamiento epidemiológico diferente.
“Por ejemplo se sabe que las mutaciones de la espiga, que es clave en la transmisión del virus, pueden estar relacionadas con la capacidad de contagio”, explicó Fernández, y añadió que eso tiene que ver con la probabilidad de que un contacto estrecho genere un caso positivo y también con las capacidades que permiten que el virus pase de persona a persona.
Es gracias a la vigilancia genómica que existe a nivel internacional, como se identificó esta nueva variante en Sudáfrica, pero aclaró Fernández que por esta razón no necesariamente Ómicron surgió en dicho país. Posteriormente la OMS determinó si los cambios identificados en la nueva variante podían afectar la transmisibilidad del virus, tenían la capacidad de producir enfermedad más grave o afectar la capacidad de las vacunas o los tratamientos. “Cuando uno de esos supuestos se considera plausible es cuando la OMS decide declararla como de preocupación”, explicó.
Estrategia de vigilancia
Colombia cuenta con una estrategia genómica con muestreos inteligentes que se hace en determinados grupos de riesgo, identifica incrementos inusuales, tiene en cuenta a los viajeros, entre otros grupos para hacer secuenciamiento genómico para identificar las variantes.
“Adicionalmente el Instituto Nacional de Salud (INS) realiza un estudio probabilístico que permite estimar lo proporción de los casos que corresponde a cada variable y describir cómo ha sido la preponderancia de una variante particular el tiempo. Eso nos permite observar que la variante predominante en 2021 en Colombia fue Mu, que progresivamente fue reemplazada por la variante Delta”, dijo Fernández.
En tal sentido es una combinación de estrategias de vigilancia, en la que también se incluye la genómica, orientada a eventos de salud pública; y el muestreo probabilístico. Todo en cabeza del INS y con el apoyo de la Red de Laboratorios de Salud Pública.
Medidas
Aunque algunos países han tomado medidas drásticas de cara a Ómicron, es de tener en cuenta que Colombia se encuentra en un momento epidemiológico diferente al que se vivía en 2020. “El año pasado teníamos muy poca información sobre el comportamiento de las nuevas variantes a nivel epidemiológico, segundo no teníamos vacunas y tercero no teníamos datos sobre la efectividad de muchas de las medidas”, explicó Fernández.
Hoy en día se sabe que el cierre de fronteras no es una medida efectiva para evitar la propagación de nuevas variantes al interior de un país, según explicó el director. “Es una medida que no es efectiva, pero además no es sostenible en el tiempo, y profunde grandes impactos sociales”, añadió.
En el caso particular de Ómicron es importante tener en cuenta el lugar donde se identificó la variante y en donde se originó. Quiere decir que no por el hecho que haya sido identifica en Sudáfrica, éste sea el país de origen.
En tal sentido, es probable que otros países de África tengan una similar o incluso mayor propagación de Ómicron, pero sencillamente no tienen las capacidades para detectarlo.
Por lo pronto ya más de 25 países del mundo han confirmado presencia de la nueva variante, en su mayoría casos importados. “Y es muy probable que en al menos Estados Unidos y Alemania, ya exista transmisión comunitaria, seguramente así en muchos más países”, sostuvo el funcionario.
Con tal escenario, es algunas semanas Ómicron estaría ampliamente con presencia en la mayoría del mundo, lo que hace poco coherente cerrar vuelos de un país en particular.
“Además que es una medida que puede ser considerada como discriminativa y puede desincentivar a los países a reportar casos, porque es como castigar la disciplina de la vigilancia, pero además produce costos sociales y económicos muy grandes”, puntualizó el director.
Vacunación
Dada la situación, ahora es el momento mucho más crítico para iniciar la vacunación o hacer los refuerzos, además de fortalecer las medidas de autocuidado como uso del tapabocas y lavado de manos.
“Tenemos una proporción de personas que no han recibido ni una sola dosis.Estos ciudadanos, independiente de su edad (mayores de 3 años) tienen que acercarse a los puntos de vacunación lo más pronto posible”, solicitó el funcionario.
En segundo orden de cara a la nueva variante, las personas ya vacunadas deben completar sus esquemas. “Hay evidencia clara de que es mayor la protección con el esquema completa que con una sola dosis”, indicó.
Por último, está el refuerzo, principalmente en los grupos de riesgo, que pueden ir por su vacuna cuatro meses después de la segunda dosis, en el caso de las personas de 50 años y más. “Está demostrado que los refuerzos, particularmente los heterólogos, tienen una mayor protección ya que estimulan el sistema inmune”, recordó.
Por eso ante la posibilidad de que Ómicron sea más transmisible, es necesario vacunarse, pero además seguir usando el tapabocas, con especial énfasis en espacios cerrados. Además, ventilar los espacios, y en un aspecto igual de importante, que los casos sospechosos o confirmados se aíslen.
“Si nos damos cuenta, son acciones que pueden hacer los ciudadanos y que son las que ya venimos realizando para combatir el covid-19, solamente que ahora tenemos una razón de más para reforzar aún más estas medidas”, sostuvo Fernández, y añadió que, por parte del Gobierno Nacional, se refuerza la vigilancia genómica, el muestro inteligente y el estudio de cadenas de contacto.
Sobre Ómicron
Lo primero que hay que decir es que hay bastante incertidumbre sobre el comportamiento clínico y epidemiológico de ómicron, pero ya hay información reciente que da indicios.
“En primer lugar sabemos que tiene unas características biológicas particulares, porque tiene un numero de mutaciones muy grande, cerca de 30 en la espiga, y muchas están relacionadas con delta y gamma”, señaló Fernández Niño.
Por otra parte, en Sudáfrica se ha identificado un incremento muy veloz en el número de casos que podría estar relacionado con una mayor transmisibilidad y eficacia para el contagio.
Un estudio más reciente, sugiere un potencial riesgo de reinfección del Sars-CoV-2. “Parece ser más frecuente en personas que tuvieron la infección pero que no se vacunaron”, explicó.
En tal sentido, la transmisibilidad podría ser mayor, incluso algunos estudios sugieren que es de 1.5 veces más; segundo estaría la potencialidad de evadir la respuesta inmune, lo que explicaría el incremento de las reinfecciones que por lo pronto se observan en Sudáfrica.
Hasta el momento los estudios no han sugerido que la nueva variante sea más severa, sin embargo, hace falta evidencia científica para llegar a análisis más concluyentes. “Pero el hecho de que sea más transmisible ya es preocupante, porque van a darse incrementos de casos, hospitalizaciones y muertes, principalmente en población no vacunada, por esto la vacunación es la mejor estrategia”, puntualizó.