El fortalecimiento de la prevención, vigilancia y control de la rabia humana convocó a OPS/OMS/PANAFTOSA, Instituto Nacional de Salud, Ministerio de Salud y Protección Social, Instituto Colombiano Agropecuario, Instituto Departamental de Salud y Secretaría de Salud de Cúcuta a la definición de acciones para su eliminación.

Desde Norte de Santander, las autoridades de salud extendieron un llamado para la concertación del Plan Binacional que permitirá establecer acciones conjuntas desde las regiones que comparten frontera física con Venezuela.

El departamento completa 20 años sin casos de rabia humana transmitida por perros gracias a los esfuerzos institucionales establecidos en el Programa Nacional de Eliminación de esta enfermedad entre los que se encuentra garantizar la vacunación canina y felina reduciendo los riesgos de muerte y la necesidad de profilaxis posteriores a las mordeduras o arañazos profundos del animal infectado.

Aunque la región está rumbo a la eliminación de la rabia humana, aún sigue registrando casos de rabia silvestre, especialmente la ocasionada por murciélagos hematófagos en bovinos, caprinos y porcinos, siendo Toledo el municipio con mayor registro durante el 2015 con 34 casos, seguido de Arboledas con 11 y Labateca con 3 casos.

Juan Alberto Bitar Mejía, Director del Instituto Departamental de Salud destacó el compromiso demostrado por organizaciones internacionales y nacionales que priorizaron los departamentos de frontera. “Como autoridades sanitarias estamos llamados a articular esfuerzos para la prevención, estableciendo una hoja de ruta hacia la eliminación de la rabia humana definiendo políticas de salud pública veterinaria sectoriales y transectoriales, un gran reto que asumimos reconociendo la situación, asumiendo la gestión ambiental para su control y garantizando vigilancia y control”.

Situación en las Américas, un punto de partida para la cooperación entre países.

Colombia no presenta casos de rabia humana transmitida por perros, sin embargo países de la región de Las Américas como Venezuela, Brasil, Bolivia y Perú siguen presentando casos.

Para Marco  Vigilato, delegado OPS/OMS/PANAFTOSA “La colaboración entre los vecinos es fundamental para mantener la vigilancia y control, especialmente en un proceso de eliminación de la enfermedad; aunque la rabia humana es una sola se debe prestar especial interés en el control de la transmisión en especies silvestres como murciélagos hematófagos y mangostas que representan riesgos para poblaciones dispersas como las comunidades indígenas y rurales”.

El Organismo Andino de Salud que ha acompañado la formulación de Planes Binacionales en zonas de frontera entre Bolivia, Chile y Perú facilitando la definición de estrategias de intervención que permitirán a toda la zona andina realizar inmunizaciones en simultánea, experiencia que se traslada a la frontera nororiental, específicamente a Norte de Santander. “Colombia registra coberturas de más de 80% en vacunación canina e intensifica acciones para proteger a toda la población, actividad que acompañaremos técnicamente”, destacó Luis Beingolea, delegado OAS.

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